Deslizo los dedos por la arrugada sábana de algodón
y recorro tu contorno.
Mientras
el hondo compás de tu respiración
llena los espacios
que la luz de la tarde deja a oscuras...
Contemplo tus rasgos definidos que parecen atemporales
como este Septiembre.
Atardece ya,
me hundo en tu abrazo y murmuras indescifrables palabras
que me aprueban y enlazan.
Me entrego a tu abrazo
que me envuelve
y me dejo absorber por la cadencia del momento,
apagando mi mente,
y solo respiro.
martes, 3 de diciembre de 2013
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario